martes, 21 de julio de 2009

Dejavu

se me ocurrió contarle a mi hijo menor que alterna 15 días con la madre y 15 conmigo un sueño fenomenal que me había sucedido con su madre, mi ex.

Entraba en la casa de la madre, lugar donde vivimos gran parte de nuestros días previo a la separación luego que decidimos regresar a Bariloche, pero en el piso de abajo.
Había una reunión familiar ahí donde es la casa de los santonato desde que la conozco, ese piso de arriba que le fueron agregando piezas o ambientes a medida que lo necesitaban.
Estaban en lo que era la cocina cuando yo conocí esa casa que para entonces era cocina y comedor, luego con el tiempo "agregaron" un comedor donde ahora se suceden las reuniones familiares.
Estaban reunidos en ese ambiente con un par de mesas extendidas para albergar a todos los familiares, porque no son "invitados" son familiares ya que las reuniones, desde que yo conozco a mi ex son solamente de familiares y creo que siempre fueron así y por eso mismo también creo que ella y yo nos llevamos tan bien por tanto tiempo teniendo en nuestra intimidad tan pocas cosas con la que construir lazos eternos... o casi.
Entonces yo entro, veo en esa mesa enorme y superpoblada de hermanos, sobrinos, etc. a mi ex y al lado a mi hija quimey y de pronto cuando me ven estallan en un solo de carcajadas que se extendió por unos minutos.
Mi sueño termina ahí. Pero resulta que (tal vez) por ese mismo momento graciela también estaba soñando al respecto... y los sueños se conectaron (en mi fantasía también, debo decirlo, porque no hay posible registro como para saber que es así exactamente)

El sueño de Graciela
Entonces mi hijo, muerto de risa me dijo que justamente la madre le había contado que tuvo un sueño conmigo como protagonista.
Yo entraba en su casa (la casa de la madre) y los miraba sorprendido porque se reian de mi vestimenta.
Un saco Amarillo, pantalones jeans marrones, corbata floreada y zapatos de punta blanca.

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